10/10/10

El nacimiento de Moisés. Éxodo 1,2

       

                                              El nacimiento de Moisés
                                                      Éxodo 1,2


La familia de Jacob, es decir, los israelitas, continuaron creciendo en Egipto después de que José y sus hermanos murieron. El nuevo Faraón de Egipto no sabía nada de la vida de José, y no le gustaba que hubiera tantos israelits en Egipto. El Faraón pensaba que si había una guerra, los israelitas, con toda seguridad, apoyarían al ejército enemigo de Egipto.
Por este motivo el Faraón obligó a los israelitas a ser esclavos.
Ellos tenían que trabajar en la construcción de las ciudades y en los camos de agricultura.
Sin embargo, los israelitas seguían aumentando y eran cada vez más. Cuando el Faraón vio esto, dio la siguiente orden: "Todos los varones israelitas recién nacidos deben ser arrojados y ahogados en el río  Nilo". Sucedió que una mujer de la familia que descendía de José, es decir, de la familia de Leví, tuvo un niño varón. La madre lo escondió en su casa todo el tiempo que pudo, pero cuando tuvo tres meses lo colocó en una canastilla tejida con papiro y lo escondió en la orilla del río. Una hermana del bebé se ocultó cerca para observar qué pasaba con su hermano. De repente, la hija del Faraón bajó al río para bañarse acompañada de sus doncellas. Ella descurió la canastilla y al abrirla, encontró a un bebé que lloraba. La hija del Faraón sintió compasión por el niño.
En seguida, la hija del Faraón reconoció que era un bebé israelita y que la madre lo había escondido allí para salvarle la vida. Entonces, la hermana del niño se acercó y le preguntó: ¿Quiere que busque una mujer israelita para que alimente al niño? La hija del Faraón respondió: "Sí, por favor". Y así la niña corrió a su casa y trajo a su mamá hasta la orilla del río, donde la hija del Faraón la estaba esperando. La madre tomó a su bebé y lo llevó a su csa, donde siguió cuidándolo. Cuando el niño creció un poco, la madre lo devolvió a la hija del Faraón, quien lo adoptó como su hijo, dándole el nombre de Moisés.
Ella lo presentaba como si fuera su propio hijo en el palacio del Faraón.